No puedo dejar sin respuesta a quien gratuitamente y sin argumento alguno, se permite ofenderme con el calificativo de “tonto”, porque mi axioma: “Si no existe Dios ¿de dónde surge la bondad?" , le parece una “tontería”.

Era de esperar que de la nación más liberal del planeta surgiese un nuevo concepto del negocio editorial.

 Ni se entienden ni se entenderán jamás si no asumen que los tres hablan de la misma cosa, pero con un lenguaje y en un contexto diferente.

“La guerra de Inés” es una conmovedora historia basada en un hecho real durante la batalla de Sigüenza  (julio/ocubre, 1936). En 1931, el año de la proclamación de la II República, Inés y Andrés son dos adolescentes de una aldea próxima a Sigüenza. Ambos crecerán en el violento periodo republicano. Inés tiene tres hermanos de izquierdas y Andrés un padre conservador que le fuerza al sacerdocio para apartarlo de Inés y de sus hermanos. Cuando estalla la guerra civil, Andrés tendrá que resolver el dilema entre una Iglesia corrupta, a la que ya pertenece, y el mensaje evangélico de Jesucristo y decidir cuál de los dos bandos es verdaderamente cristiano. Inés, tras el asesinato de su hermano mayor por los falangistas locales, se afilia a la milicia de las Juventudes Socialistas, Andrés se decide por el bando republicano como asistente de un coronel médico y será testigo de los horrores de la guerra. Asediados por los nacionales, Inés y Andrés se refugian, junto con milicianos y civiles